Expertos dicen que plantas trabajan en condiciones de emergencia
MARIELA LEÓN | EL UNIVERSAL
lunes 17 de septiembre de 2012 12:00 AM
La región oriental ha reportado en los últimos años, un deterioro sostenido del servicio eléctrico. "En Anzoátegui se han cuantificado 7.029 interrupciones en 2011, cifra extraordinariamente alta que aún se mantiene este año", reveló Antonio Carvajal Trías, expresidente de Eleoriente y exdirectivo de Cadafe.
El analista consideró que la situación en esa entidad "es muy comprometida", especialmente en la zona norte, en la cual se concentra la mayor demanda del Estado. "Allí", explicó, "hay un grupo de 8 subestaciones trabajando con muy altos niveles de sobrecarga, al igual que el 70% de los circuitos de salida que dan servicio a las líneas de distribución. Eso significa que están trabajando en condiciones de emergencia".
Destacó Carvajal que en adición a los obstáculos antes señalados, "está la obsolescencia de los equipos que, en los últimos 12 años no se ha hecho nada; esto trae como consecuencia un calentamiento excesivo, entonces las protecciones y sistemas en las redes fallan. No hay un programa de mantenimiento preventivo ni correctivo".
Dijo además, en la plenaria nacional del sector eléctrico del Comando Venezuela (Luz para el Progreso), que la prestación del servicio se ha visto agravada por "el pavoroso incendio ocurrido este año en la subestación Barbacoa que acabó prácticamente con la edificación donde se maneja la medición de los sistemas de la zona norte del Estado, debido a la falta de mantenimiento".
"No existía siquiera un extintor de incendio que amortiguara las llamas, esa es un a muestra muy grande de la dejadez que se ha tenido con el área de distribución" en Anzoátegui. Comentó que en la región, como el resto del país, "hay una falta de incentivo de los trabajadores, eso se debe a que el esquema de la meritocracia fue eliminado".
Usuarios molestos
Isnaldo Jiménez, ingeniero electricista del estado Carabobo, manifestó que tradicionalmente las regiones más afectadas por las interrupciones y apagones habían sido la andina y oriental, pero que más recientemente se ha incorporado la central, epicentro de las grandes, medianas y pequeñas industrias manufactureras del país.
Indicó que "anteriormente había un equilibro en el sistema por el aporte de Planta Centro, de unos 700 megavatios (Mw) que hoy no lo está dando. De allí que las interrupciones son cada vez más frecuentes y mayores".
El especialista precisó que la termoeléctrica "opera en forma limitada, a veces son dos o tres unidades que generan energía y no siempre con la misma potencia, esto es, no llegan a producir los 700 Mw de antes por falta de mantenimiento. Eso obliga a racionamientos interdiarios, porque las máquinas están susceptibles a fallas".
Actualmente se le "está dando prioridad a la industria, a lo circuitos de hospitales y aeropuertos, entonces a los usuarios residenciales los están recargando con racionamientos; este es el sector más afectado", dijo. "Ya están irritados de tantas fallas y cortes del servicio de manera consecutiva".
"El problema", acotó, "sigue siendo de generación. Cualquier perturbación en Planta Centro se procede a racionar. Hay una alta vulnerabilidad".
mleon@leuniversal.com
El analista consideró que la situación en esa entidad "es muy comprometida", especialmente en la zona norte, en la cual se concentra la mayor demanda del Estado. "Allí", explicó, "hay un grupo de 8 subestaciones trabajando con muy altos niveles de sobrecarga, al igual que el 70% de los circuitos de salida que dan servicio a las líneas de distribución. Eso significa que están trabajando en condiciones de emergencia".
Destacó Carvajal que en adición a los obstáculos antes señalados, "está la obsolescencia de los equipos que, en los últimos 12 años no se ha hecho nada; esto trae como consecuencia un calentamiento excesivo, entonces las protecciones y sistemas en las redes fallan. No hay un programa de mantenimiento preventivo ni correctivo".
Dijo además, en la plenaria nacional del sector eléctrico del Comando Venezuela (Luz para el Progreso), que la prestación del servicio se ha visto agravada por "el pavoroso incendio ocurrido este año en la subestación Barbacoa que acabó prácticamente con la edificación donde se maneja la medición de los sistemas de la zona norte del Estado, debido a la falta de mantenimiento".
"No existía siquiera un extintor de incendio que amortiguara las llamas, esa es un a muestra muy grande de la dejadez que se ha tenido con el área de distribución" en Anzoátegui. Comentó que en la región, como el resto del país, "hay una falta de incentivo de los trabajadores, eso se debe a que el esquema de la meritocracia fue eliminado".
Usuarios molestos
Isnaldo Jiménez, ingeniero electricista del estado Carabobo, manifestó que tradicionalmente las regiones más afectadas por las interrupciones y apagones habían sido la andina y oriental, pero que más recientemente se ha incorporado la central, epicentro de las grandes, medianas y pequeñas industrias manufactureras del país.
Indicó que "anteriormente había un equilibro en el sistema por el aporte de Planta Centro, de unos 700 megavatios (Mw) que hoy no lo está dando. De allí que las interrupciones son cada vez más frecuentes y mayores".
El especialista precisó que la termoeléctrica "opera en forma limitada, a veces son dos o tres unidades que generan energía y no siempre con la misma potencia, esto es, no llegan a producir los 700 Mw de antes por falta de mantenimiento. Eso obliga a racionamientos interdiarios, porque las máquinas están susceptibles a fallas".
Actualmente se le "está dando prioridad a la industria, a lo circuitos de hospitales y aeropuertos, entonces a los usuarios residenciales los están recargando con racionamientos; este es el sector más afectado", dijo. "Ya están irritados de tantas fallas y cortes del servicio de manera consecutiva".
"El problema", acotó, "sigue siendo de generación. Cualquier perturbación en Planta Centro se procede a racionar. Hay una alta vulnerabilidad".
mleon@leuniversal.com
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